Jordi Soler se adentra en la literatura infantil

El escritor Jordi Soler publicó Noviembre y Febrerito (editorial Malpaso), libro en el que narra la historia de un gigante diminuto y su enorme hermano, quienes bajan desde las montañas para conocer el mundo de los humanos. El día en el que deciden interactuar con los hombres es el día en que se celebra el carnaval para aprovechar los disfraces de algunos "gigantes" que danzan por las calles.
Febrerito es un personaje cuya estatura va entre la de los humanos y los gigantes mientras que Noviembre es un enorme gigante quien por su tamaño y fuerza tiene como futuro convertirse en un muy buen trabajador.
Esta es la primera historia que Jordi Soler escribe para niños y las ilustraciones están a cargo del artista gráfico Santi Moix.
Se trata de una historia inspiradora con gigantes bondadosos como protagonistas en donde los temas principales son la convivencia y los secretos que esconde la realidad. El libro, publicado por editorial Malpaso, fue diseñado por Soler para los lectores de menor edad, adolescentes y niños.
Para quienes descubren a este autor, vale saber que Jordi Soler nació en la ciudad mexicana de Veracruz en 1963 y es miembro, junto a Enrique Vila-Matas, Antonio Soler y Eduardo Lago, de la "Orden de Finnegans", dedicada a la veneración de Ulises, la obra de James Joyce.
Desde Bocafloja, su primera novela, se convirtió en una de las voces literarias más importantes de su generación. La Casa de las Culturas del Mundo (Haus der Kulturen der Welt) en Berlín, elaboró un perfil sobre su obra donde dice: "Más que cualquier otro de los escritores de su generación, Soler ha conseguido un estilo propio, altamente visual, en su prosa y su poesía".
Durante los últimos diez años del siglo XX, de manera paralela a su trabajo de escritor, hizo programas de música y literatura en dos de las estaciones de radio más influyentes de México. Luego fue diplomático en Irlanda y ahora vive en Barcelona, la ciudad que abandonó su familia después de la Guerra Civil, donde trabaja en su siguiente novela y en artículos que publica en diarios y revistas.
Es caballero de la irlandesa Orden del Finnegans y miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte de México.

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